La novela entre Gerard Piqué y Shakira parecía haber llegado al final de los escándalos mediáticos y los portales. Sin embargo, está muy lejos de ello, y todo en función de la custodia y la tenencia de sus pequeños hijos, Milan y Sasha, que podrían no ver a su padre tan seguido por una decisión de la cantante colombiana que el exfutbolista cuestionó ampliamente durante todo el transcurso de su tormentosa separación amorosa y de bienes materiales.
Tras meses de escándalo y negociaciones de productos materiales como un avión lujoso, de parte del exjugador del Barcelona y de Shakira, se supo que la cantante había tomado la decisión de llevarse a sus hijos a vivir con ella a principios del año 2023 a Miami, en los Estados Unidos donde reside parte de su familia. Esto fue lo que hizo que Gerard Piqué se ponga en contra de la colombiana, ya que quiere quedarse en Barcelona, donde inició una relación con la joven Clara Chía Martí, a poco de su separación.
Ahora, se llevó a cabo el acuerdo por la tenencia de sus hijos, en una extensa reunión que duró más de 12 horas y que contó con la presencia de Shakira, Pilar Mañé, la abogada de la colombiana, y su representante legal, Ramón Tamborero. Mientras que Gerard Piqué también llegó en compañía de su abogado. Según fuentes cercanas al nacido en España, él mismo buscaba que sus pequeños se quedaran en Barcelona hasta 2024, lo que finalmente se supo que no será posible.
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La íntima reunión entre Piqué y Shakira, en la que uno de los dos lloró
Según el medio español Look, la negociación entre ambos se llevó a cabo en buenos términos por lo cual tuvo una duración muy extensa. Sin embargo, trascendió que no faltaron los reproches, la incomprensión y algunas posiciones encontradas. Además, también se supo que la reunión fue muy civilizada en la que no hubo palabras malsonantes, dentro de una conversación difícil y dura como lo era para Gerard Piqué y Shakira decidir sobre el futuro de sus dos hijos.
Look aseguró que mientras el exfutbolista, que hizo oficial su decisión de abandonar el profesionalismo hace muy poco, se mostró “muy tocado anímicamente y agotado”, la cantante de Barranquilla llegó en un tono más distante y hasta denotó cierta frialdad. Con el paso de las horas, la tensión fue en aumento y terminó con Piqué llorando tras dialogar en privado con Shakira, quien lo consoló amablemente, dejando atrás la presencia de sus abogados.