Algunos medios italianos difundieron una noticia que vuelve a tener a Gary Medel en el ojo de la tormenta tras algunos conflictos de los que fue protagonista junto a algunos compañeros en el entrenamiento de su actual club, el Bologna, donde destacan su fuerte temperamento, después de los problemas con los aficionados de la semana pasada.
Desde el diario Corriere dello Sport, presenciaron este jueves el entrenamiento del cuadro de Bologna, en el cual el futbolista de la Selección chilena tuvo un encontronazo que terminó a las patadas con el volante croata Nikola Moro. La situación se provocó a raíz de una jugada, en donde el europeo le entró fuerte a Gary Medel, durante un partido 11 vs 11 que organizó el técnico, Thiago Motta, y generó la sorpresa de los aficionados.
Fue Moro quien ejerció una intensa marca sobre Gary Medel, algo que el defensor de La Roja no se tomó de buena manera. “Gary paró y pateó a su compañero oponente croata durante la sesión de ayer por la mañana. Nada violento, más bien una reacción irritada”, indicó el periódico italiano. El croata comprendió la situación y se acercó a Medel en señal de paz, pero el Pitbull no aceptó la aclaración y con algún otro compañero a su lado, se alejó. Sin embargo, ambos habrían terminado en buenos términos. Según los medios, hablaron y se dieron un abrazo.
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La pelea de Gary Medel con los aficionados
La última semana, Gary Medel enfrentó a los hinchas del club italiano que se encuentra en un mal momento futbolístico, y se ubica cerca del descenso en la tabla de posiciones. Los aficionados se hicieron presentes en un entrenamiento y se dedicaron a apretar a jugadores y cuerpo técnico.
Frente a esta provocación que recibieron, el técnico Thiago Motta respondió de la misma manera a los ultras y fue una escena que no pasó inadvertida para el chileno, que es conocido por ser una persona con coraje y carácter, dentro y fuera de la cancha. Al ver el apriete de los hinchas, el volante salió a defender a su entrenador, momento en el que se produjo un malentendido entre el pilar de la Roja y los fanáticos y hasta hubo gritos y amenazas.