Mauricio Isla está pasando por una semana muy especial. El jugador se mantiene lejos de la prensa, ya que el sábado vivirá uno de los partidos más importantes desde su vuelta a chile, donde se enfrentará a Universidad de Chile, el equipo de sus amores.
Este será el primer clásico del ex jugador del Flamengo, es por ello que el jugador ya vislumbra un escenario impresionante y hostil, ya que los fanáticos azules no le perdonan las promesas que hizo y quedaron en el aire.
Recordemos que el jugador está jugando en Universidad Católica, acérrimo rival de la U de Chile, a pesar de esto cuando el jugador estaba en Europa siempre expresó su deseo de jugar en la U. “Tengo esa espinita de jugar en Chile. Siempre lo he dicho: soy hincha de la U. Mi madre me ha criado así, toda la vida. En las navidades siempre había una pelota, una camiseta de la U", confesó.
"He tenido muchos compañeros en la Selección que son de la U. Vargas, Aránguiz, Díaz, todos hablan de la institución y de lo buena que es. Quiero cuidarme, llegar de la mejor forma. Si no estoy bien, no voy a volver a la U. Sé cómo piensan los hinchas y uno tiene que ser respetuoso con los hinchas, con los dirigentes. Si yo vuelvo, no será para retirarme”, dijo el jugador cuando se encontraba en Fernerbache en 2019.
Negociaciones similares
A fines de abril, el Huaso ya planificada su vuelta al fútbol chileno, ya que el jugador tenía ganas de ponerle fin a su carrera por el extranjero y poder regresar a su tierra natal con su familia.
Por este motivo, su amor por la U lo llevó a preguntar al club si estaban interesados en contar con él. Sin embargo, su salida del Flamengo no fue sencilla, ya que el equipo brasilero quería obtener réditos por la millonaria inversión que habían hecho temporadas atrás.
Posteriormente, el escenario cambió y el Flamengo estuvo dispuesto a dejar marchar en libertad a Mauricio Isla, por lo que el jugador comenzó a planificar su vuelta a Chile.
Luego el futbolista se reunió con los dirigentes de los Cruzados y así lo confesó: “Tuvimos una negociación muy rápida y sorpresiva. Tati (Buljubasich, el gerente deportivo) y Juan (Tagle, el presidente) se acercaron después del partido con Flamengo a manifestarme las ganas de que viniera a la UC. Eso me fortaleció, me gustó la idea”.
Sin embargo, el Huaso fue perdiendo poco a poco el interés por llegar a la U y por consiguiente el contacto con los dirigentes. En relación a esta situación, Isla tiene su versión y asegura que la U nunca se le acercó a pesar de los dichos del club: “No he hablado mucho del tema de la U porque la gente se da cuenta de lo que está pasando en el club, con un período difícil. Me ofrecí a la U, quería volver a jugar en Chile y sentir lo que era estar cerca de mi familia, y no se dio por muchas cosas diferentes, el dinero no tiene nada que ver”.
“No estoy en los 10 jugadores mejores pagados del fútbol chileno y en la UC me llamaron y visitaron durante tres días. Eso me gustó mucho. Quería salir bien del Flamengo, uno de los mejores equipos de Sudamérica. Luché para salir de ahí y el único equipo se me acercó con algo en la mesa y con largos años de contrato, es la UC. Era algo que tenía que aceptar”, comentó Mauricio Isla.
Isla se prepara para jugar su primer clásico y lo hará con la camiseta de la UC, equipo que lo formó de joven y será en el Nacional ante 23 mil hinchas azules.