Un día como hoy, pero de 1976, proveniente de Unión de Santa Fe, y tras haber sumado experiencia también en Atlanta, donde debutó, River y Gimnasia, Hugo Gatti arribó a Boca para empezar a escribir su historia. La misma fue gloriosa, ya que permaneció por 12 temporadas, obtuvo enormes logros, y marcó un antes y un después en el fútbol argentino.
A la hora de hablar de la rica historia del club de la Ribera, no se puede pasar por alto a Hugo Orlando Gatti. Aquel extravagante arquero, que llegó al club de la mano de Juan Carlos "Toto" Lorenzo, se ganó rápidamente el cariño de la gente, en base a sus grandes actuaciones, pero también por su innovador estilo, que le regaló una buena dosis de espectáculo al arco de Boca.
“El Loco” fue pionero de un estilo que se conocería como el del “Arquero-jugador”, puesto que lejos de quedarse bajo los tres palos, el histórico portero del Xeneize tomaba riesgos, y era habitual verlo fuera del área, ya sea para cortar avances, o para salir con pelota dominada, como un futbolista de campo más. Esta característica lo acompañó hasta el final de su carrera, y paradójicamente, una de sus arriesgadas salidas le costó un gol en su último partido como profesional.
Sin embargo, su final no pudo opacar su trayectoria. En Boca, Gatti ganó seis importantes y recordados títulos. En el ámbito doméstico consiguió el Metropolitano 1976, el Nacional de ese mismo año, en el que derrotó en una mítica final a River, y el Metropolitano 1981, de la mano de Diego Maradona. Pero además, fue pieza clave en las conquistas de las ediciones 1977 y 1978 de la Copa Libertadores, y también de la Copa Intercontinental 1977, la primera en la historia del club argentino.
De los récords, al día que jugó de 9
Además de los títulos, Hugo Gatti registra en el fútbol argentino, algunas marcas que todavía no han sido superadas. “El Loco” cuenta con el récord de mayor cantidad de partidos jugados en el profesionalismo de su país, con 765 partidos, es también quien más penales atajó, privilegio que comparte con Ubaldo Fillol, con la cifra de 26 remates contenidos, y además, es el más veterano en disputar un encuentro profesional en Argentina, con 44 años.
Por otra parte, el exarquero protagonizó un sinfín de situaciones curiosas, y hasta se dio el lujo de jugar en Boca como delantero. La llamativa situación ocurrió en 1984, cuando el Xeneize realizaba una pretemporada en Estados Unidos, en la cual se enfrentaría al Atlas de México. Aquel día, cuando restaban pocos minutos para el final, ante la falta de variantes, el técnico Dino Sani envió a Gatti como delantero, en lugar del lesionado Berta. Tuvo pocas intervenciones, pero dejó un recuerdo que sirve como muestra de sus locuras.