Luego de que estallara la noticia de que Red Bull habría infringido las normas de límite presupuestario el año pasado por, estimadamente, 5 millones de dólares; Christian Horner no esquivó la bala y salió a negar que los rumores sean ciertos. El escándalo se desató luego de que el periódico alemán "Auto Motor und Sport" publicara un informe en el que sostenía las acusaciones contra los Toros Rojos y Aston Martin.
Mientras tanto, Red Bull enfatizó que los informes eran "solo especulaciones" y Aston Martin admitió estar "en conversaciones con la Federación Internacional del Automóvil (FIA)". Sin embargo, el jefe de los Toros Rojos, Christian Horner, negó en declaraciones a "Sky Sports F1" cualquier rumor antes del Gran Premio de Singapur e insistió en que su equipo no había infringido ninguna regla.
"Ya saben, están siguiendo correctamente ese proceso. Y creo que la próxima semana, cuando declaren los certificados, nuestra presentación estuvo por debajo del límite, y depende de la FIA, obviamente, seguir su proceso, lo que están haciendo actualmente", comenzó Christian Horner.
Aún así, el ingeniero británico reconoció que Red Bull atraviesa un proceso de investigación con la FIA que deberá resolverse en las próximas semanas. "Y como dije, sí, estoy en un proceso y creo que siempre habrá rumores. He oído hablar de infracciones importantes y lo que sea. Ciertamente no soy consciente de eso", prosiguió Christian Horner.
Christian Horner y Red Bull, al borde de una dura penalización
Según las regulaciones actuales de la F1, una infracción por debajo del cinco por ciento del límite daría lugar a la emisión de una sanción económica. En relación a esto, se conoció que Mercedes y Ferrari creen que el dinero extra podría haber representado una ventaja de rendimiento de alrededor de medio segundo. ¿El punto más álgido de la posible penalización? La posibilidad de que consideren inválida la legitimidad del triunfo de Max Verstappen el año pasado y que, de algún modo, impacte en la defensa por el título que domina esta temporada el neerlandés.
La FIA confirmó que actualmente hay un proceso formal que analiza los gastos del equipo antes de que se emitan los certificados de cumplimiento la próxima semana. Al respecto, Christian Horner reiteró que Red Bull tenía "confianza" en sus cuentas y no temía ningún castigo.
"Quiero decir, todos los equipos teóricamente están sujetos a eso. Entonces habrán mirado la cuenta enviada de cada equipo. Así que saben, están siguiendo un proceso y saben que la fecha de conclusión se ha movido de julio a septiembre, creo, ahora a octubre, pero es un gran trabajo. Estamos muy seguros de nuestra presentación. Entonces, ya sabes, cualquier cosa diferente a eso, obviamente, esperaremos noticias de la FIA", sostuvo el directivo de Red Bull.