El expiloto de F1, Timo Glock, puso sobre la mesa el mayor temor de Red Bull: ¿Max Verstappen perdió un aliado importante en su compañero de equipo, Checo Pérez? Después del gesto de egoísmo del actual monarca de la categoría con su escudero en el Gran Premio de Brasil, el joven piloto recibió muchas críticas. E, incluso, trascendió que Christian Horner estalló de furia. Aún así, el que bajó el tono del cruce fue el mismo Pérez, que publicó en su cuenta oficial de Instagram que ya habían limado las asperezas.
Para contextualizar: Red Bull le ordenó a Max Verstappen que cediera su lugar si no podía superar a Fernando Alonso en las etapas finales y el piloto neerlandés no consiguió atrapar al asturiano, pero aún así decidió ignorar las órdenes a la escudería austríaca y cruzó la línea de meta por delante de Checo Pérez, quien, sorprendido, afirmó que con esa actitud Verstappen finalmente "demostró quién es realmente".
El escándalo de garaje y mediático deja ahora a Red Bull con mucho trabajo por hacer en la final de este fin de semana de 2022 en Abu Dhabi para asegurar un doblete en la clasificación y completar su temporada dominante. Pero Glock afirmó que Checo Pérez puede estar considerando si quiere ayudar a Max Verstappen a conseguir un tercer título mundial el próximo año, en lo que parece ser una relación unidireccional después del incidente en Brasil.
"Por supuesto, la acción no es propicia para el próximo año. En el futuro, Pérez considerará si seguirá apoyando a Verstappen. Hay que recordar lo que hizo Sergio Pérez el año pasado para Max en Abu Dhabi, y aquí, estamos hablando del cuarto o quinto puesto".
Max Verstappen en el ojo de la tormenta
Más adelante, dijo: "Hace un año, Pérez convirtió a Verstappen en campeón mundial. Ahora él [Verstappen] podría haber ayudado a su equipo y a su compañero de equipo. Es por eso que no entiendo por qué Max reaccionó así. Me gustaría escuchar las razones: deben ser muy grandes si no cambias de lugar internamente. Por el momento, creo que Max podría haberlo resuelto con elegancia".
Se especuló que la controversia que estalló el pasado fin de semana podría provenir del Gran Premio de Mónaco, donde Pérez supuestamente admitió que se estrelló intencionalmente para que Verstappen terminara detrás de él en la parrilla. Pero fue un extraño acto de desafío que tomó a muchos por sorpresa, especialmente considerando la posición de Red Bull en la pista. Ninguno de los dos pilotos luchaba por la victoria de la carrera y el bicampeón ya selló su temporada con el título.