Max Verstappen es uno de los mayores referentes de la Fórmula 1 en la actualidad debido a que es el último campeón, por lo que los medios buscaron su reacción ante la nueva medida de la FIA para intentar solucionar el problema del 'porpoising'. Esta sancionará a las escuderías que tengan mucho efecto rebote, por lo que deberán subir la altura de su monoplaza y perderán velocidad durante las carreras.
Esto beneficiaría a Max Verstappen y a Red Bull, ya que el coche de ellos no sufre del 'porpoising' y es uno de los más veloces de la parrilla, por lo que solo afectaría a los demás rivales. En ese sentido, se esperaba que el piloto neerlandés esté a gusto con esta nueva medida, puesto que le facilitaría su trabajo de cara al bicampeonato de la Fórmula 1, pero sus declaraciones estuvieron muy alejadas de esto.
“Creo que es un poco decepcionante que haya un cambio de reglas a mitad de temporada. No es ni siquiera sobre si nos afecta a nosotros, sino que no debería de ser que un equipo se queje y, de repente, cambien las reglas sobre esto”, sostuvo el piloto de Red Bull durante una charla con el medio “Racer”.
Las palabras de Max Verstappen no mostraron alegría por no ser afectados por la nueva regla, sino que más bien fueron una critica a la FIA, pues dejó en evidencia la privilegiada influencia que tiene Mercedes en la Fórmula 1. El equipo de Toto Wolff fue el que impulsó las quejas sobre el 'porpoising', pero no obtuvo los resultados que esperaban y terminaron perjudicados con la nueva medida.
Cómo afecta a Mercedes
Los planes de Toto Wolff eran dejar en evidencia que el efecto rebote generaba problemas físicos en los pilotos, por lo que era necesario que todos los monoplazas tengan una elevación de manera obligatoria. Sin embargo, finalmente, la FIA dictaminó que los únicos equipos forzados a subir la altura de sus coches serán los que más 'porpoising' tengan.
Para Mercedes, esto se convertirá en un serio problema porque priorizaban la velocidad del monoplaza ante la salud de sus pilotos y, por eso, no elevaban su monoplaza. Ahora, estarán obligados a hacerlo y perderán mucho rendimiento respecto a los rivales que no sufren del efecto rebote. En caso de que no respeten y superen el nivel de 'porpoising' permitido, recibirán una sanción en cada Gran Premio.