El Gran Premio de Canadá será un fin de semana para el olvido en la carrera de Checo Pérez, pues no lograba hacer buenos tiempos en el Circuito Gilles Villeneuve y finalmente chocó su monoplaza contra los muros durante la segunda sesión de la calificación. Para empeorar su suerte, durante la vuelta nueve de la carrera, su coche no respondió al cambio de marcha y tuvo que abandonar el circuito sin sumar puntos para el Campeonato de Pilotos.
Tras las evaluaciones del equipo Red Bull al monoplaza de Checo Pérez, se determinó que tanto el alerón delantero como la caja de cambios sufrieron graves daños que deberán reparar para el siguiente Gran Premio. Los gastos que la escudería deberá asumir para reparar el coche del piloto tapatío acortarán el presupuesto de la temporada, pues deberán desembolsar una suma aproximada a los 500 mil dólares.
En primera instancia, reponer el alerón delantero del monoplaza de Checo Pérez costará 141 mil dólares a Red Bull. Esta es una de las partes más frágiles del coche y más recurrentes de cambiar para todos los equipos. Sin embargo, la caja de cambios del piloto mexicano será el verdadero dolor de cabeza que enfrentará el equipo austriaco.
Según la información que publicó el medio especializado “Motosport”, Red Bull tendrá que gastar 355 mil dólares para colocar una caja de cambios en le monoplaza el Checo Pérez. De esta manera, el choque del piloto mexicano achicará el presupuesto de la escudería, el cual está fijado en un límite de 140 millones de dólares para el Campeonato Mundial de 2022.
Al borde de la sanción
El choque de Checo Pérez no solo significará un gasto para Red Bull en cuanto a su presupuesto, sino que el piloto tapatío también tendrá que tener cuidado de no repetir un fallo como el de la 'Qualy 2' por el resto de la temporada, debido a que está en el límite permitido de cambios de caja sin sufrir penalizaciones. La Fórmula 1 estableció que todos los monoplazas solo puedan cambiar esta pieza tres veces en este año y el mexicano ya lo hizo previo a las carreras de Bahréin y Mónaco.
Si el piloto de Red Bull llega a sufrir otro accidente o una falla del motor lo obliga a volver a reemplazar la caja de cambios, deberá sufrir una sanción de cinco puestos de parrilla para la siguiente carrera. Dicha penalidad la vivió Charles Leclerc en Canadá, quien finalmente decidió hacer un cambio total del motor y tuvo que comenzar el Gran Premio desde la última posición.