La temporada de 2021 fue una de las más emocionantes de los últimos años de la Fórmula 1, donde todos los aficionados siguieron la histórica pelea entre Lewis Hamilton y Max Verstappen por el Campeonato de Pilotos. Esta llegó a tener situaciones polémicas donde los accidentes se hicieron presentes en muchas carreras, además de que la definición en el Gran Premio de Abu Dhabi fue controversial debido a que el neerlandés habría sido beneficiado por las decisiones de la FIA.
Estos problemas hicieron que la relación entre el piloto de Mercedes y el de Red Bull se rompa por completo, al punto de que hoy en día no cruzan palabras más allá de un saludo cordial en el paddock. Sin embargo, Max Verstappen parece estar dispuesto a hacer las paces con Lewis Hamilton, pero en sus últimas declaraciones admitió que el conflicto fue más que nada entre los equipos y no tanto entre ellos dos.
“Tenemos mucho respeto el uno por el otro. Si uno de los dos lo hace bien, por supuesto que se lo puede decir al otro. El conflicto del año pasado no fue necesariamente entre los pilotos, sino más entre los equipos”, sostuvo Max Verstappen durante una entrevista con “Servus TV” durante el fin de semana del Gran Premio de Austria.
Las palabras de Max Verstappen podrían ser el inicio de una reconciliación entre él y Lewis Hamilton, mientras que la situación de los equipos la tendrán que manejar Christian Horner y Toto Wolff, jefe de Red Bull y Mercedes respectivamente. Por su parte, el piloto británico aún no ha respondido las declaraciones del neerlandés, por lo que los aficionados tendrán que esperar un poco más para ver si esta disputa tiene un final de una vez por todas.
Para calmar a los fans
Las declaraciones de Max Verstappen también pueden hacer efecto en los aficionados de la Fórmula 1, quienes tomaron partido en la disputa entre ambos pilotos y no tienen problemas en demostrarlo en cada carrera. En Silverstone, tierra de Lewis Hamilton, el público inglés abucheó al neerlandés cada vez que pasaba por las gradas.
Por otro lado, en Austria los aficionados de Red Bull invadieron las gradas y protagonizaron una escena muy polémica durante la clasificación. Esto debido a que el público presente en el circuito festejó cuando Lewis Hamilton estrelló su Mercedes contra los muros a gran velocidad durante la Q3, lo que fue reprochado hasta por el mismo Max Verstappen a través de sus redes sociales.