Cuando Red Bull arribó a la F1 levantó un mar de criticas, ya que la escudería liderada por Christian Horner no era vista como un proveedor de coches y todo se veía como una millonaria estrategia de marketing de la bebida energética. Por este motivo, la prensa era muy dura.
El jefe de equipo de Red Bull tuvo que lidiar con estas arduas críticas y aún lo hace, ya que parece disfrutar de las críticas y de armar polémicas, por ejemplo, el año pasado tuvo una acalorada discusión con Toto Wolff.
A Christian Horner no le importan las criticas
”Si te molesta, no deberías hacer el trabajo. Mi trabajo es hacerlo lo mejor posible para el equipo y la gente a la que represento'', expresó el británico en diálogo con Sky Sports.
Christian Horner hace todo lo posible para que Red Bull triunfe y utiliza todos los métodos que tiene a su alcance para que su escudería sea beneficiada, no se preocupa por las críticas o por lo que digan los demás, por este motivo, se comparó con el legendario entrenador del Manchester United, Sir Alex Ferguson.
'Si miro a alguien como un Sir Alex Ferguson, dudo que alguna vez se preocupara por la percepción que otros directivos o personas tenían de él en el deporte'', concluye Horner.
Christian Horner subraya el intenso trabajo que lleva a cabo como jefe de Red Bull, tanto en el aspecto deportivo como comercial, además, él es el encargado de las relaciones políticas con la FIA y debe de tratar con los patrocinadores que se interesan en lucir sus logos en el monoplaza RB18.
Christian Horner pone de ejemplo a Ferguson como una persona que nunca ha tenido como función contentar a los que le rodean, ya que su único objetivo es hacer de la mejor manera posible su trabajo. Esta es la función que tiene el inglés dentro de Red Bull y pese que se acerca a los 20 años dentro del equipo, no tiene necesidad de dar un paso al costado para darle lugar a las nuevas generaciones de directivos.