En 1998, Julio César Chávez celebró una de las peleas más importantes de su carrera en el boxeo, el combate contra el "Mago" González. Si bien resultó en un empate técnico, el mexicano le dio una gran paga de 40 mil dólares a su preparador Nacho Beristáin.
Así lo reveló el entrenador azteca en una entrevista para "Un Round Más" al recordar cómo fue que trabajó con Julio César Chávez. Pues, para ese entonces, el exboxeador se encontraba al final de su carrera, pero no tenía un técnico que lo ayudase a prepararse para el encuentro.
Por aquel entonces, Nacho Beristáin había estado detrás de la victoria del campeonato de la categoría de peso pluma de Ricardo "Finito" López y esto le llamó la atención a la leyenda que no dudó en pedirle "prestado" su entrenador a su colega. "No seas gacho, para una pelea", prometió Julio César Chávez.
De hecho, fue esta condición de que solo serían para una pelea que Beristáin aceptó la propuesta de "El César", por lo que no esperaba que la estrella le pagase una fortuna por ayudarlo a entrenar. Es más, el preparador físico admitió que pensaba hacerlo gratis.
La sorpresa que se llevó Nacho Beristáin tras la pelea de Julio César Chávez y el "Mago" González
Lo normal sería que el expúgil estuviese contento por haber ganado, pero si se recuerda la mala racha con la que venía cobra todo el sentido que haya decidido celebrar el empate. Por este motivo, fue que Chávez decidió buscar al entrenador para tomar unas copas.
Pero Nacho Beristáin se considera, ante todo, un profesional, por lo que no quería sumarse a las alocadas fiestas que organizaba Julio César Chávez. De esta forma, el boxeador optó por liquidar el pago en su habitación, cuando exclamó que cada uno de los miles valían los 40 minutos que entrenaron juntos.