Ayer se conocieron los comentarios del presidente de Ferrari, John Elkann, quien si bien aseguró estar agradecido con Mattia Binotto y su equipo por colocar un coche competitivo en la parrilla de la F1 esta temporada, también aseguró no estar satisfecho con el rendimiento de la estructura. Es por esta razón que el expiloto Mika Hakkinen advirtió que las declaraciones de Elkann ejercen "más presión sobre el equipo", que se adiciona a la de las últimas semanas, dado que la escudería italiana descartó con sus errores la posibilidad de luchar por el título mundial, que no consiguen desde 2007.
En su columna en "Unibet", Hakkinen expresó amén de la situación que atraviesa el equipo que comanda Mattia Binotto: "Ferrari siempre ha tenido mucha presión y es algo único para ellos. Por supuesto que en McLaren sentimos la presión de competir para ganar, dar lo mejor de nosotros, no estar satisfechos si no ganamos, pero Ferrari siempre ha tenido esta presión adicional de ser una especie de equipo nacional".
Además, el finlandés reflexionó sobre lo difícil que resulta el presente deportivo que atraviesan los de Maranello, considerando que comenzaron la temporada con el auto más rápido de la parrilla en velocidad punta y consiguiendo dominar las dos primeras carreras de la campaña, antes de sellar el debacle de Charles Leclerc, que aspira a su primer título mundial, por errores estratégicos.
"Creo que esta temporada ha sido difícil porque comenzaron con un auto rápido, victorias en carreras y mucha confianza, pero Red Bull ha operado de manera tan eficiente, cometiendo muy pocos errores y mejorando el auto", reflexionó Hakkinen.
Ferrari, ahora recibe presión por John Elkann
Ahora, Charles Leclerc se encuentra 116 puntos detrás de Max Verstappen en el campeonato y la Scuderia continúa luchando por achicar la brecha en el de Constructores. El piloto monegasco tan solo ha ganado una carrera desde el Gran Premio de Australia en abril. Los errores estratégicos que le costaron la victoria a Leclerc en los Grandes Premios de Mónaco, Gran Bretaña y Hungría, motivaron que antes del Gran Premio de Italia, el CEO de Ferrari, Elkann, criticara al equipo italiano. En declaraciones a "Gazetta dello Sport", Elkann enfatizó que "no estaba satisfecho" con el equipo y pidió mejoras. A la vez, presionó al jefe del equipo, Mattia Binotto, alegando que había "visto demasiados errores" esta temporada.
Elkann explicó: "Debemos seguir progresando y eso se aplica a los mecánicos, los ingenieros, los pilotos y, obviamente, todo el equipo directivo. Incluido el jefe del equipo. Hemos visto demasiados errores, desde problemas de confiabilidad hasta errores de manejo y errores estratégicos. Hemos confiado en Binotto y su equipo. Esa fue la decisión correcta. Ha valido la pena y podemos agradecerles que Ferrari sea competitivo y gane de nuevo. Pero no estoy satisfecho. Creo que siempre podemos mejorar".