A pesar de haber obtenido el Campeonato de Constructores los últimos ocho años, en la actualidad, Mercedes ocupa el tercer lugar en la competencia. El equipo de Brackley falló en el diseño de su monoplaza esta temporada y todavía no consigue el ritmo de carrera de sus máximos rivales, Red Bull y Ferrari. Ante este escenario, George Russell reconoció que "nada está descartado" cuando se le preguntó si el equipo podría modificar radicalmente el W13 para la próxima temporada.
Recordemos que los Silver Arrows tuvieron problemas para alcanzar el rendimiento al que están acostumbrados, luego de fallar en el planteo de su coche ante las nuevas regulaciones que entraron en vigencia esta campaña. El equipo para el que pilota George Russell inicialmente se vio afectado por el efecto de marsopa, que causa una falta de carga aerodinámica y, como resultado, intentaron ponerse al día durante casi toda la temporada. Ahora, Mercedes parece ser algo más competitivo en pistas de baja velocidad, pero sigue siendo débil cuando se trata de velocidad punta. Por esta razón, el joven piloto británico insinuó que la escudería que comanda Toto Wolff podría buscar un rediseño radical y no descarta nada mientras buscan volver al frente.
"Creo que nada está descartado", dijo para el sitio web de Fórmula Uno. "Por supuesto que tenemos un diseño bastante único con los pontones. No está fuera de lugar que continuemos con ese diseño, pero tampoco está fuera de lugar que cambiaremos completamente la filosofía", se sinceró.
George Russell sobre el W13
Más adelante, el coequipero de Lewis Hamilton habló sobre la decisión de Mercedes de presentar un diseño con pontones que, como se demostró, no se adaptó bien a la nueva normativa: "Pero, en última instancia, ya sea que tengamos los pontones laterales anchos o los pontones estrechos, ese no es el diferenciador de rendimiento, hay más". Sin embargo, en noticias más positivas para los fanáticos de Mercedes, George Russell también explicó que el equipo estaba comenzando a comprender mejor sus problemas, especialmente el rango de rendimiento entre pistas rápidas y lentas.
"Creo que entendemos exactamente por qué en circuitos como Zandvoort y Budapest fuimos competitivos, y entendemos por qué en circuitos como este [Monza] y Spa no fuimos competitivos", explicó el británico. "Eso no significa que podamos resolver los problemas de la noche a la mañana".