Después de ganarle al kazajo Gennady Golovkin en su tercera pelea, Saúl Canelo Álvarez no se rinde y va por más. En esta oportunidad, el mexicano se anima a incursionar fuera del ring y busca hacerse un lugar en la industria de las bebidas, sin dejar de lado sus raíces.
El boxeador de 32 años, campeón del peso supermediano de las cuatro instituciones más importantes del mundo, lanzó una marca de bebidas alcohólicas listas para tomar, inspiradas en sus raíces jaliscienses y mexicanas. Este nuevo producto en el que ahora invierte su dinero y tiempo, se encuentra en auge desde hace tiempo, pues se comercializan listas para tomar y el consumidor solo debe abrir la lata, la mayoría posee por lo general un sabor agradable al paladar.
VMC es el nombre que eligió el boxeador para sus productos, que son las siglas de «Viva México Cabrones». Las bebidas traen consigo un sabor y diseño único, inspirados en los orígenes de Canelo Álvarez, Jalisco, famoso mundialmente por su producción de tequila. Estos productos están hechos con el tequila Los Altos y cuentan con tres diferentes sabores de cócteles icónicos del país rediseñados: la Paloma, Margarita y Jamaica. VMC se presenta en una elegante lata de 355 mililitros y tiene una graduación alcohólica de 6%.
En relación a este nuevo rumbo en su vida, Álvarez se mostró alegre y declaró: “Hoy se hace realidad un sueño que demuestra que somos únicos y estamos listos para celebrar con toda la fuerza que nos une”.
La última pelea de Canelo Álvarez
El púgil triunfó ante el kazajo Golovkin el pasado 17 de septiembre, en el T-Mobile de la ciudad estadounidense de Las Vegas, por decisión unánime. Con este logro, mantiene su supremacía en la categoría de las 168 libras.
La primera ocasión en la que el mexicano y el kazajo se enfrentaron sobre el ring fue el 16 de septiembre de 2017, la cual terminó en un empate por decisión dividida de los jueces. Luego en la revancha que se disputó en el mismo escenario, Canelo Álvarez se llevó el triunfo por decisión mayoritaria, ya que dos de los jueces lo vieron como triunfador, mientras que el otro marcó un empate.