Mercedes vive una temporada fuera de lo normal. Luego de muchos años, no es la escudería más poderosa de la parrilla. Tanto es así que todavía no ha podido lograr ninguna victoria en el actual campeonato mundial de la Fórmula 1.
Ante este panorama, Mercedes ya planea lo que será el Gran Premio de Italia. El ingeniero de la marca alemana, Andrew Shovlin, espera que el próximo fin de semana no sea tan malo como el Gran Premio de Bélgica. Allí no tuvieron una buena competición.
El directivo de la escudería de Lewis Hamilton afirmó: "Podemos llevar alerones más pequeños, pero si llevamos alerones más pequeños tenemos un poco menos de carga aerodinámica y somos optimistas de que algunos de los problemas específicos que tuvimos en Spa sobre los baches no deberían afectarnos".
Además, Shovlin aclaró: "Creemos que podemos conseguir que el coche funcione mejor. Sin embargo, el Red Bull parece muy eficiente, es rápido en las rectas y es rápido en las curvas, y esos problemas parecen mayores para nosotros cuando vamos a las pistas de baja carga aerodinámica".
Hamilton y su palabra
Por otro lado, Lewis Hamilton también se refirió a la carrera: "En el momento fue duro, me hubiera gustado chascar los dedos y poder hacer algo para pararlo, pero hasta ese momento era una carrera genial. Creía que con duros y la estrategia a una parada podía batir a Red Bull".
En la misma sintonía, el piloto de Mercedes recordó el momento en donde abandonó Yuki Tsunoda: "No sé qué ha sucedido exactamente con el Toro Rosso (AlphaTauri), entró en boxes, salió, entró de nuevo, volvió a salir y luego volvió a pararse. Es lo más extraño que he vivido".