El pan antiinflamatorio de chía y lino es una solución culinaria que va más allá de la simple satisfacción alimentaria. Esta receta, marcada por la sencillez y la calidad de sus ingredientes, ofrece una opción saludable y sabrosa. La chía y el lino, reconocidos por sus ácidos grasos omega-3 y su contenido de fibra, aportan una textura única a este pan, al mismo tiempo que proporcionan beneficios antiinflamatorios y promueven la salud digestiva.
La ausencia de gluten en esta receta lo convierte en una alternativa perfecta para aquellos que siguen una dieta libre de gluten o buscan reducir su consumo. La combinación de chía y lino no solo da estructura al pan, sino que también agrega beneficios nutricionales adicionales, adaptándolo a diversas preferencias dietéticas. La presencia de estos ingredientes se traduce en una sensación prolongada de saciedad, gracias a la fibra que ayuda a mantener niveles estables de azúcar en la sangre, controlando así los picos de hambre y colaborando en el manejo del peso corporal.
Esta receta no solo es una delicia para el paladar, sino que también proporciona un impulso de energía sostenible. Una rebanada de este pan no solo es una opción satisfactoria para el desayuno o la merienda, sino que además es una contribución valiosa para mantener una dieta equilibrada y favorecer la salud digestiva y antiinflamatoria.
Ingredientes:
1 taza de harina de almendra
1/2 taza de harina de coco
1/2 taza de semillas de chía
1/2 taza de semillas de lino molidas
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1/2 cucharadita de sal
4 huevos
1/4 taza de aceite de coco, derretido
1 cucharada de vinagre de manzana
1/4 taza de agua
Paso a Paso:
Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para pan.
En un tazón grande, mezcla la harina de almendra, harina de coco, semillas de chía, semillas de lino molidas, bicarbonato de sodio y sal.
En otro tazón, bate los huevos y luego agrega el aceite de coco derretido, el vinagre de manzana y el agua. Mezcla bien los ingredientes húmedos.
Vierte la mezcla húmeda sobre los ingredientes secos y revuelve hasta obtener una masa homogénea. La consistencia será similar a una masa para pastel.
Deja reposar la masa durante unos minutos para permitir que las semillas de chía y lino absorban parte del líquido y la mezcla adquiera una consistencia más firme.
Vierte la masa en el molde para pan y extiéndela uniformemente.
Hornea en el horno precalentado durante aproximadamente 30-35 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, salga limpio.
Disfruta de cada rebanada de este delicioso pan antiinflamatorio de chía y lino, lleno de nutrientes y bondades para tu salud. Úsalo para acompañar tus comidas o simplemente como un tentempié saludable. ¡Esperamos que esta receta añada un toque nutritivo y sabroso a tu rutina diaria!