El circuito de Bahrein recibió la llegada de Max Verstappen y el equipo de Red Bull para las primeras pruebas antes del inicio de la temporada, que será el próximo 5 de marzo en esa misma pista. Pese a las sanciones y restricciones, la plantilla de la escudería de Christian Horner es la favorita a quedarse una vez más con el título, el cual obtuvo el neerlandés en 2021 y 2022 de manera consecutiva. Sin embargo, no todo salió como el campeón defensor esperaba y un problema condicionó el rendimiento del piloto.
Antes de dar por finalizada su participación en los test de pretemporada, un problema irrumpió en su monoplaza, uno de los más potentes del circuito. En la tarde del viernes, desde la prensa del país de origen del piloto neerlandés de 25 años, trascendió la noticia de que el inconveniente de Max Verstappen se debía a una fuga de aceite en el RB19 que se encontraba conduciendo.
Al momento del inconveniente, el piloto neerlandés solo había completado 18 giros y debió pasar más tiempo dentro del garaje que en la pista, mientras el equipo de mecánicos de Red Bull trabajaba para resolver el problema lo más rápido posible. De esta manera, el neerlandés finalizó sus sesiones de entrenamiento, ya que en el día sábado le tocó a su compañero, Checo Pérez.
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La opinión de Max Verstappen sobre el nuevo coche de Red Bull
Desde el comienzo de las pruebas en Bahrein, el RB19 se mostró como uno de los monoplazas más rápidos y uno de los que menos problemas presentaron sobre la pista, incluso si se tiene en cuenta los que marginaron a Max Verstappen durante gran parte del test del día viernes.
Por ello, el integrante de Red Bull Racing dio su opinión acerca del coche en comparación al RB18 y confesó: “Definitivamente se conduce un poco diferente. Creo que también está un poco relacionado con los neumáticos. Pero en general, creo que es definitivamente una mejora con respecto al año pasado", para luego agregar que "el principal problema que tuvimos el año pasado es que el coche tenía mucho sobrepeso.