El equipo Haas de Fórmula 1 se encuentra en medio de una temporada desafiante en 2023 debido a su estrecha colaboración con Ferrari, de quien adquiere una parte significativa de su paquete técnico debido a limitaciones en su propia infraestructura para desarrollar su monoplaza de forma independiente.
En un esfuerzo por romper con la tendencia actual, el equipo Haas planea una actualización importante en el estilo de diseño de su monoplaza, similar a lo que hizo McLaren previamente. Esto marcará un alejamiento del enfoque mantenido por Ferrari en los últimos años y será similar al estilo de Red Bull.
Las actualizaciones se esperan para el Gran Premio de Estados Unidos a fines de octubre, un momento inusual para introducir cambios significativos en un monoplaza en medio de la temporada. La decisión se toma en un intento de obtener un rendimiento adicional y servir como banco de pruebas para el coche de 2024.
A pesar de esta iniciativa, Haas seguirá dependiendo en gran medida de Ferrari en términos de arquitectura del monoplaza. Sin embargo, el equipo mantiene la esperanza de superar las circunstancias y sorprender a la parrilla en 2023 o 2024.
El director del equipo Haas de Fórmula 1 enfatiza la importancia de cambiar su enfoque de diseño para el futuro, siguiendo el ejemplo de McLaren, y destaca la necesidad de buscar mejoras significativas en lugar de simplemente agregar piezas nuevas al coche existente. Esta decisión se toma con la intención de brindar un mejor rendimiento a sus pilotos experimentados y competentes.