Fernando Alonso y Kimi Raikkonen ingresaron a la Fórmula 1 en el año 2001, compitiendo para Minardi y Sauber respectivamente. A lo largo de sus carreras, se cruzaron en varias temporadas, incluida la contienda por el título en 2005, donde Fernando Alonso salió victorioso, y en 2007, cuando Kimi Raikkonen se coronó campeón con Ferrari.
Peter Windsor, quien ocupó el cargo de jefe de equipo en Williams, elogia las habilidades de ambos pilotos y sugiere que, combinando sus talentos, se crearía al "piloto de carreras perfecto". Destaca la capacidad de Kimi Raikkonen para la velocidad en una vuelta rápida y la versatilidad de Fernando Alonso para pilotar en diferentes condiciones.
Peter Windsor argumenta que la combinación de Kimi Raikkonen, quien era prácticamente imbatible en una vuelta rápida, con Fernando Alonso, que destacaba en la gestión de carreras y maximización de recursos, sería la combinación ideal de habilidades.
Cuando se le pregunta sobre quién era el piloto más rápido entre los dos, Peter Windsor se inclina hacia Kimi Raikkonen en términos de velocidad pura, pero destaca la resistencia y la capacidad de adaptación de Fernando Alonso, quien ha continuado compitiendo en la Fórmula 1 con éxito incluso a los 42 años.
Peter Windsor enfatiza que tanto Kimi Raikkonen como Fernando Alonso eran excelentes pilotos en sus propios términos y que aprecia las contribuciones de ambos al deporte.